Es la tercera vez, que construyo poemas de los cuentos que leo. Siempre tengo que mencionar a Don Juan, sus relatos que conmocionan sus lectores, no dejan de mostrar la belleza de su literatura. De nuevo les traigo, un préstamo que realizará al cuento La Mujer de Bosch.
Espero les guste.
LA MUJER
La carretera está muerta, nada la resucitará, infinitamente larga.
El sol de acero, tan candente, al rojo.
El sol la mató.
La carretera muerta está ahí, desenterrada, gris.
La mujer corrió, quería ver si venia alguien.
Pero sobre la carretera muerta solo estaba…
El sol que la mató.
Adoro los cuentos del profesor, la dimensión de sus escritos.
Para la introducción del poema PISADAS, tendríamos que dar gracias por cosas simples, como la lágrima de una madre, una gota de sudor del trabajador/a, la gota de agua que se evapora, la pluma que abandona el ave, la hilera de hormigas, un óvulo fecundado y por qué no, las pisadas desconocidas.
PISADAS?.
Posaré la alegría
en las pisadas desconocidas
Con alas de las abejas
Arroparé el borde de los pasos
Con espumas de olas
un molde construiré
lo pondré al temple
en el horno quemante del abrazo
Lo acomodaré en un espacio revenido
de huellas conocidas
que roban,
en secreto,
la alegría.
E-mail.: milqueyamonteagudo@hotmail.com
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